diumenge, 20 de març del 2011

Punk verdadero en Barcelona

Una mañana muy fría me lo encontré tirado en la OranienStrasse, en Kreuzberg, pensé que estaría haciendo una de sus muertes conceptuales pero cuando cruzamos la mirada, me saludó con una simpatía que me sorprendió. Entonces me percaté de que llevaba toda la espalda llena de mierda, o se había cagado o se había caído sobre una mierda. Me preguntó que a dónde me dirigía, yo le dije que me dirigía hacia la galería de unos conocidos, a la inauguración de una exposición de pintura hiperrealista de un artista local de éxito.

Friedrich decidió acompañarme. Llegamos a la galería y después de beber un vino blanco que ofrecía el galerista, mi amigo se murió de repente en medio de la sala. Poco a poco la incomodidad general fue en aumento, nadie se atrevía a ayudar al muerto, Friedrich estaba en una postura bastante fea e incómoda, y desprendía un olor a mierda insoportable, alguien dijo: "esto es indignante".

Quizás Friedrich quería convertir esa inauguración en un evento indigno, o simplemente convertir su cuerpo, una vez más, en algo indigno. Nunca más le volví a ver.

Juan Navarro, Nancy Spungen.
(a l'Antic teatre de Barcelona. L'únic espai autènticament berlinès de Barcelona)